lunes, 13 de julio de 2009

Ayer por la noche vi El pico, de Eloy de la Iglesia. Era una peli mítica de estas que se tienen que ver y que no había visto. Como película en sí no me gustó mucho, me pareció a ratos aburrida, mal interpretada y demasiado evidente a veces. Pero tiene algunos elementos muy interesante y no discuto su relevancia histórica. Además, todo el rato hay un ambiente tan angustiante... eso tiene mucho mérito.

Pero no se puede ni comparar con Deprisa, deprisa. Eso es otro nivel. Las meten en el mismo saco por la temática y la época pero hay un abismo entre ellas.
Yo, además, tengo una personal devoción por esta peli. No recuerdo exactamente cuándo la vi por primera vez pero me marcó. No se qué es lo me gusta tanto en concreto, pero es una película que me toca en lugares no siempre accesibles y bastante personales. Quizá por eso fue la única película que quise traerme a Londres cuando me marché.
Se la recomiendo absolutamente a todo el mundo.

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